La valorización tecnológica consiste en la creación de valor económico y social a partir de los resultados de la investigación, con el objetivo de rentabilizar la inversión en I+D+i y favorecer su transferencia a la sociedad.
En Kinrel, enfocamos la valorización llevando a cabo un estudio personalizado de la tecnología y su potencial de mercado, para poder sacarle el máximo partido y diseñar el modelo de explotación más adecuado.
Como parte de las actividades de valorización, los estudios de mercado y la vigilancia tecnológica son clave para la evaluación de la competencia y para conocer las tendencias de los sectores a los que se dirige la tecnología.
Además, para negociar posibles licencias de tecnología o buscar socios para su desarrollo y explotación, debemos determinar su valor económico, teniendo en cuenta, aspectos externos e internos.
Uno de los puntos principales a la hora de establecer un valor para nuestra tecnología, es evaluar la protección efectiva que tenemos para nuestro producto final, bien sea mediante patentes u otras figuras de protección o mediante secreto industrial.
Conocer hasta qué punto se encuentra o no protegida nuestra tecnología, es esencial tanto para la estrategia interna de la compañía como para hacer valer nuestro proyecto ante un posible inversor o licenciante.