La Investigación, el Desarrollo y la Innovación (I+D+i) es el motor que impulsa el tejido productivo de cualquier país, generando industrias de alto valor añadido que dan lugar a empleo cualificado y riqueza.
El desarrollo de proyectos de investigación conlleva una gran complejidad, no solamente en lo que se refiere a la ejecución de los experimentos, pues existen numerosas acciones no tan visibles, que son cruciales para que la investigación se realice con éxito.
La solicitud, gestión y justificación de la financiación; el diseño y ejecución de los proyectos de acuerdo con los estándares y buenas prácticas internacionales; y por supuesto, no debemos olvidarnos de tener una buena estrategia de divulgación y de protección de los resultados de la investigación, para asegurar su futura explotación.
Independientemente de la fase de desarrollo en que nos encontremos, tanto en la investigación básica como en la aplicada, debemos tener en cuenta cuál va a ser la estrategia para asegurar que los resultados lleguen a la sociedad, generando valor en forma de nuevos productos o servicios.
Para ello, es importante que los investigadores cuenten con apoyo multidisciplinar, que suele venir por parte de las Oficinas de Transferencia de los Resultados de la Investigación (OTRIs) en el caso de las universidades o centros de investigación, y de las Unidades de Apoyo a la Investigación (UAIs) en el caso de los hospitales.
En el caso de las spin-off o start-up tecnológicas, cuyos proyectos de investigación suelen encontrarse en fases más cercanas al mercado, será cada vez más importante tener en cuenta los asuntos regulatorios y diseñar una buena estrategia de comercialización, y obtener un buen asesoramiento en estos temas puede ser clave para el éxito del proyecto empresarial.
En Kinrel, queremos ser un aliado de confianza para investigadores y gestores de innovación y transferencia tecnológica en este complejo y apasionante mundo de la I+D+i, tanto para consultas puntuales como para la gestión de proyectos.